lunes, 29 de noviembre de 2010

Palabras del segundo montón

Cuando alguien inicia algo, digamos un proyecto individual, un negocio o algo mucho menos ambicioso como un blog, se propone algunas metas aunque sea por compromiso o por método, no sé, y a medida que avanza la cosa, se puede pensar en hacer balances. Los balances normalmente tienden a hacerse a fin de año, por eso del cambio del calendario o por simple convención social. Pero resulta que el aniversario del blog es hoy y después de festejar con todas las de la ley (es decir con todas las mujeres policías) no voy a poder esperar a que termine el año para cerrar el balance.
Por esa razón también es la renovación, para darles la impresión de que es nuevo, con el inútil objetivo de seguir interesándolos, de seguir buscando su comentario picante y sabrosón, de vez en cuando con la publicación de algún texto que valga la pena.
Va a ser inevitable que me ponga sentimental a lo largo de este penoso discurso, porque me siento muy orgulloso de tenerlos a ustedes como habitantes de este espacio, tan virtual como tangible, tan real como lo puede ser algo en la red pero a su vez intenso y de una forma difícil de explicar, reconfortante. Su compañía me enriquece, sus palabras me hacen crecer, sus insultos me hacen ver lo que no quería ver, el que no paga las tasas municipales algo me quiere decir...
Y como en la vida real, también debo lamentar ausencias que pican, silencios que aturden y vacíos que arrastran y duelen de la misma forma. Y como en la vida misma, seguimos adelante.
Una historia de ficción, un personaje que no existe, textos arrancados del alma misma, fotos que iluminan, palabras que son adictas a nuestros ojos pero mueren de vergüenza cuando las leemos, una calle que puede ser todas y un despacho sombrío que revive cada vez que ustedes entran. Un poeta que sangra por el corazón, un tanguero nostalgioso, un timbero adicto a los dados, un filósofo en cuestiones irrelevantes, un amante incansable, una novia inalcanzable, un conductor de camionetas, todos juntos en la ciudad. 
Todo eso es en definitiva esta Ciudad Visible, todos nosotros recreamos en cada punto y coma un rincón de nuestra propia ciudad y la ponemos acá, para edificar sin pausa este rompecabezas que una vez completo nos mostrará que todo lo vivido no es más que un simple recuerdo y que el porvenir aún ni se bosqueja.
Por fin, este segundo aniversario encuentra la luz y arriba glorioso al horizonte, se posa en el palco preparado y parte raudo hacia el pasado, porque las cosas que nos hacen felices duran menos que la llama de un fósforo enfrentando una sudestada. Y no crean que es pesimismo. Es la verdad.
Agitando una bebida sin alcohol, con bronceador factor 50 y las ojotas alineadas al lado del sillón, los invito a dejar sus firmas aquí al pie, para que la prosperidad irreverente se ría sin pudores de la melancolía de sus predecesores.

¡Saludos mis queridos ciudadanos!

Int. Etienne

jueves, 25 de noviembre de 2010

La educación de nuestro futuro

Cuando una universidad nacional es noticia, es más seguro que sea por los años de dejadez por parte de los responsables del sistema educativo que por sus logros académicos. Los alumnos suelen ser el fusible más débil, no por sus responsabilidades de saber sino por su desorientación vocacional. Si en la etapa en que más ávidos están de incorporar conocimientos sus profesores no saben cómo motivarlos y orientarlos, seguirán a la deriva, desaprobarán exámenes, iniciarán tres o cuatro carreras (las abandonarán), harán un curso rápido de dos meses y eso será todo.
Esto nos lleva al eslabón profesores; hay cada vez menos que llegan a esta actividad por vocación que por necesidad. Ellos más que ninguno son los que deben alentar a los chicos con conciencia cívica, sabiendo que están formando las bases de la sociedad por venir.
Nos queda un eslabón más que serían los padres o los valores y principios que los menores tendrán como parámetros, absorbidos en la etapa de crecimiento y formación de la personalidad.
Sin una política de estado que traspase los tiempos partidarios, un proceso con un marco legal que encuadre la reconstrucción de este sistema que no debe ser perverso, tampoco aristocratizante y menos aún segregacionista.
Todo sistema funciona correctamente si cada una de sus piezas y componentes así lo hacen. ¿De qué vale una ley de educación excelsa si políticos, rectores, profesores, alumnos y padres estamos acostumbrados a la cultura del "zafe" y no nos comprometemos más que superficialmente?. Nosotros como individuos debemos hacernos cargo del rol que ocupamos.
Si somos alumnos, tomar con seriedad este hecho y sus alcances: ¿nos damos cuenta que nos estamos formando para brindar un servicio que se espera sea de calidad?.
Si somos dirigentes, tener conciencia de lo que representamos (en forma transitoria) dentro de la universidad. ¿Nos damos cuenta del impacto que generamos siendo referentes?. ¿Tenemos en claro que la universidad es una casa de altos estudios que me brinda conocimientos y no poder?.
Es un trabajo que implica compromiso pleno de todos los involucrados en el sistema, extenderlo a nuestros sucesores en el proceso, acentuar el sentido de pertenencia (no de propiedad) en los ingresantes y cultivar la virtud de la paciencia. ¿O se pensaron que iba a ser fácil?

lunes, 22 de noviembre de 2010

Mi primo Benoît, "de l'Aveyron pour le monde" [5]

En estos momentos mis padres están disfrutando del crudo invierno francés, visitando familiares y paseando como es dable hacerlo en momentos libres de la vida. Malditos jubilados, podrían haberme llevado...
De allá se renuevan las noticias de mi primo Benôit (para los que no lo conocen, revisen el archivo, vagos) y también las curiosidades.
Por lo visto, la ley de Murphy es conocida en todos lados... ¿Qué? ¿No saben de qué estoy hablando? No me hagan usar los decretos de necesidad y urgencia en desterrarlos a todos, por favor.
Les decía que la Ley de Murphy tiene su versión en francés y mi primo se ve que la sufre en carne propia. Aquí, algunas de sus preferidas:
1.- Theorème de la loi de Murphy: Tout corps plongé dans une baignoire, déclenche systématiquemente la sonnerie du téléphone. (Todo cuerpo sumergido en una bañera, desencadena sistemáticamente que el teléfono suene).
2.- Loi de Tata Jacqueline: C'est celui qui ronfle qui s'endort toujours le premier. (Es aquel que ronca el que se duerme primero).
3.- Principe de Ruby: La probabilité de rencontrer une personne de ta connaissance augmente quand tu est avec quelqu'un avec qui tu ne veux pas être vu. (La probabilidad de encontrarse con una persona conocida aumenta cuando estás con alguien con quien no querés ser visto).
4.- Loi de Roger: C'est seulement après que l'hôtesse a servi le café, que l'avion traverse une zone de turbulences. (Es solamente después de que la tripulante de a bordo ha servido el café que el avión atraviesa una zona de turbulencias).
Explication de Tonton Bernard: Le café est la cause principale de turbulences en altitude. (El café es la causa principal de turbulencias)

Y esta última, que me pasa SIEMPRE:
5.- Loi de Moses: C'est quand on ne regarde pas que le but est marqué. (Es cuando uno no está mirando que el delantero marca su gol).

Se ve que hay inquietudes y problemas que son generales y mundiales y que les pasan a todos por igual. Ustedes, estimados ciudadanos ¿han sufrido alguna ley murphiana en carne propia?
Destilen su veneno y descarguen su bronca, acá tienen auditorio.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Cosas que (se) me ocurren...

Trilogía de ideas:

.- De tus palabras no pude aprender nada pero en tus ojos sospeché tu verdad.

.- Detrás de todo consejo que no se pide hay una intención que no se comparte.

.- Bajo el peso de nuestras acciones caen los miedos y los prejuicios.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Carta de cambio

Hola amiga de todos mis órganos vitales! (si pongo el corazón solo, los demás me hacen un paro general que termino en el hospital y el alma se queja pero por otras cosas!)

Preparando unos papeles para entregar (después te cuento para qué) encontré tu, creo, última carta y no pude esquivar el aluvión de párrafos que me generó, así que acá estoy llenando de letras una página que mejor estaba en blanco…

Estos últimos días, por no decir meses, se están haciendo interminables y muy dificultosos de transitar. Uno no sabe a ciencia cierta por qué, pero se hace una muy gran idea. En el buen sentido de la palabra, es tiempo de crisis y, para decirlo en castellano, estoy cagado hasta las patas! Todo el mundo me dice que no me haga problema, que va a estar todo bien, que no nos van a dejar solos y todo eso, incluso yo lo sé. Los sentimientos son una serie de entidades con voluntades propias… Ahora estoy con ansiedad, mañana probablemente con diarrea.

Los papeles culpables de todo esto son lo de la universidad, ya que no sé si te conté (creo que si) lo que quiero hacer es el traspaso de universidad para terminar la licenciatura y así no tener problemas como telerman o blumberg! Ya me estoy armando de paciencia, porque es una chorrera de trámites (programas de la carrera y de las materias deben ser autenticados) y no sé que más pasos al pedo. Más paciencia…

En el laburo, hay diferente clima, la certeza de ciertos cambios genera un diálogo más relajado y trato más fácil de llevar. Novedad de último momento! La Pao consiguió un laburo en bahía y ya no va a venir más, salvo algún que otro finde para no perder el contacto (y los $120 del plan). No la vi pero creo que se lloró la vida la pobre… En estos últimos tiempos, yo le hice un poco la cabeza (por no poner que la re cagué a pedo) de que se consiga un trabajo en otro lado, que cualquier cosa le iban a pagar más que acá, etc. Ya veremos...

Las colmenas han sido un desastre, se nos murieron un montón y estamos en decadencia, aparte no llueve y el campo es una lágrima (valga la húmeda paradoja) Ahora las vamos a llevar a la pampa a ver que pasa, estoy a full preparando y renovando material. Con el Amicale, también estoy laburando bien, nos cambiamos de sede, pasamos todo el equipo del proyecto de la lengua francesa a sede propia, nos cagamos peleando con los de la AF (viejas malculeadas) y en los próximos días organizamos una cena para recaudar fondos. Ah y también tenemos la asamblea para renovar cargos. También estoy más comprometido con eso, para irme más tranqui.

En casa estamos todos bien de salud, más no de carácter! El genio familiar se potencia con la edad (debe ser una característica general). Mi hermano lleva la casa a buen ritmo, ya están en el techo. Los viejos andan bien, ayer fueron a bahia a ver a la doctora, no hubo complicaciones, control de rutina. Mi hermana ya está mirando el pueblo con cariño, se pasa más días acá que estudiando, no sé que es lo que piensa hacer.

El grupete es un quilombo aparte. Las mujeres son muy complicadas (sobre todo, estas tres). Te resumo, la rusa está distanciada de la gorda y peleada con la negra y la perla es que hay una piba casada que se pasa a los hermanos menores de la rusa y la gorda. Hay muchísimas idas y vueltas, que me dijo, que le dije, cosas de mujeres!

Bueno, espero que hayas llegado al final de estas líneas sin aburrirte, que tus cosas vayan de diez más iva (ya me responderás esta carta, maldita perra!) y sobre todo que no te olvides (para eso, tomá Memorex! Jajaj!)

Te mando muchos besos,!!

Besos

PD: no me acuerdo si la tenías pero va un regalito fotográfico!


jueves, 11 de noviembre de 2010

Héroe, algún día

Siempre quise poder salvar algo, hacer algo valioso, ser merecedor de un inigualable y único don, hacedor de inimitables actos que siempre sueño que hice alguna vez pero que nunca podré hacer.
Siempre quise ser el héroe de mi propia historia, vencer al malvado, abrazar al que está triste y ser importante para alguna causa, para alguien.
Siempre quise estar de punta en blanco, ser la estrella que despierta tu desolado suspiro, que arranca sin piedad tu corazón, que te causa fiebre cuando nuestras miradas por accidente se cruzan.
Siempre quise algo que nunca pude identificar bien, algo metafórico, algo soñado.
Y aunque no soy ni la mitad de lo que mis obstinados deseos deliran, no soy ni la sombra de lo que mis ilusos sueños imaginan, creo que algún día cesará esta incertidumbre, terminará esta tormenta de indefiniciones y finalmente lo que realmente soy y lo que me da identidad saldrá a la superficie.
Algún día, si...

lunes, 8 de noviembre de 2010

Frustración deportiva

Soy una persona mediocre para los deportes. Eso es un hecho.
También es un hecho que he intentado las más diversas manifestaciones deportivas, desde el atletismo (Finalista en TJB '94 en Cross x equipos), handball y voley (ambos en la escuela secundaria), fútbol (estoy fichado en un club, adjunto foto y los desafío a encontrarme) e incluso paddle (ahora se llama pádel), tenis, tiro, esquí y bowling. ¿Qué, no es un deporte eso?. Vamos, que hasta dan programas de póker en ESPN, caramba. Bueno, la cuestión es que de todas esas disciplinas, la más presente es por supuesto el balonpié.




Hace ya poco más de dos años que hemos formado un equipo y jugamos regularmente para entretenernos y mover el cuerpo después de pasar tantas horas en el sofá municipal. Bah, miento. Podría ser el padre de varios de mis compañeros, así que el que intenta arrastrar la osamenta por la cancha soy yo. Siempre fui delantero pero ahora mi lugar es la cueva, es decir de líbero*. Pero hay que reconocer que no he perdido mi talento (tá lento, me gritan de la tribuna) para el toque, pared y devolución al vacío.
Un detalle ínfimo pero importante en el relato es mi caracter sanguíneo cuando de deporte se trata: no me gusta perder ni a la bolita (en ese deporte también me destaqué) y me caliento como chapa al sol cada vez que nos derrotan. Grito, revoleo los brazos, corro como un poseso e incluso trato de ordenar al equipo, insulto al aire. Y me frustro.
Para peor, se les ocurrió inscribir al equipo en un torneo. Van dos fechas y no conocemos la victoria, ya se pueden imaginar mi caripela...
Ahora estoy volviendo al atletismo. El fin de semana me voy a la cordillera a participar de un maratón y por supuesto que la idea es simplemente llegar y no primero precisamente. Habrá alguna foto de ese evento para goce de los envidiosos. Acá, la competencia es contra uno mismo y el cuerpo, ver hasta donde puede uno llegar y reconocer los límites (suena a excusa, ¿no?).
Dejo por un momento el relato deportivo, es que ya estoy agitado y con las pulsaciones a mil...


* líbero: en línea de cuatro defensores es el primer marcador central; en línea de tres es el último hombre. Es quién ordena el achique y sale a golpear tobillos cuando se pone cuesta arriba el marcador. Su tarea no incluye correr largas distancias.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Viaje con la imaginación

Imaginar que vivimos en otro, diferente lugar, que nos rigen otras diferentes leyes, que nos contiene otro diferente cuerpo.
Imaginar que viajamos rápida, solitariamente por otros paisajes y vemos árboles con forma de aves, insectos con forma de agua, rocas con forma de polvo.
Pensar que el mundo no es esférico y que presenta forma de cuerpo amorfo (valga la paradoja) y varía cada tanto sólo para despistar, sólo por costumbre.
Imaginar que las palabras que decimos salen sólidas de nuestra boca (con forma de dedo pulgar, por ejemplo) y se van volando por entre las nubes mientras las miradas se entrecruzan formando nudos complicados, queriendo entender vaya uno a saber que cosa.
Pensar que nuestra realidad es de otros, y vivir viajando por nuestra imaginación, creando nuevos mundos, nuevos individuos, nuevas palabras; pensar que es real todo lo que nos rodea pero con otros nombres, otros efectos y otros olores.
Imaginar un viaje con la imaginación donde lo increíble no lo sea tan solo para el que imagine que es posible porque de ilusiones vivimos rodeados, ilusiones que creamos con nuestras mentes, nuestras manos, nuestros prejuicios y que nos limitan hasta el extremo de no dejarnos mover con libertad, verdadera y concreta libertad de seres humanos con gran inventiva para crear obstáculos, para dificultar nuestra vida.
Imaginar que el bien es tangible y verdadero, que el afecto no está en extinción, que el amor crece y se reproduce, es volverlos reales, visibles a todas las imaginaciones de los hombres y fáciles de sentir en toda la piel de animal que nos cubre.
Imaginar, qué agradable sensación nos recorre el cerebro cada vez que viaja descontrolada nuestra imaginación.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Fin y comienzo en velocidad

De pronto, el viento que golpeaba su rostro le hizo sentir una inesperada, desconocida sensación de liberación de esas trampas que lo atenazaban todo el tiempo. Ya los gritos de su hermana pidiéndole plata, los ruegos de su madre para que se consiga un mejor trabajo y crezca y los desplantes de Laura no le parecieron tan insuperables. De ahora en más, los problemas los tendrían que solucionar ellos.
La velocidad en el rostro le despejó aún más sus pensamientos; ahora estaba claro que huía de esa vida que había construido a costa de sus propios sacrificios y modelada y diseñada por extraños que decían interesarse por él. El pelo largo que tantos reproches le había valido por parte de su padre, alimentando sus infinitos prejuicios y sus hirientes comentarios, se tensaba tras su cabeza tironeado por la fuerza del viento.
Imprevistamente, un grito le brotó por la garganta, se fue agrandando a medida que avanzaba hacia afuera y se potenció en su paso sobre la lengua. Desde afuera parecía un grito de terror pero bien sabía él que era un grito de libertad, la contraseña que todos saben y que nadie usa. Se sintió poderoso, capaz de todo y se sumergió aún más en la velocidad.
Allí encontró que lo que siempre había sospechado, lo que nunca había podido ver con claridad, ahora se le presentaba sencillo, incluso hasta obvio. Desdeñó lo trivial y frunció el ceño menos de un segundo por algo que le pareció importante: ¿quién le daría de comer a Chester, su gatito?.
Pero incluso esta cuestión dejó de tener importancia en el momento en que su frente se estrelló contra la vereda.