sábado, 26 de junio de 2010

Literatura, ficción y más ciudades [15]

SEIS

-¿Qué edad tienes, Logan?
-Veintitrés. - lo dijo sin vacilar.
Santo Dios. En los labios de ella parecía jugar una sonrisa.
-Se diría que te he impactado, Pross. Por fin. Mis malas palabras, no. Pero esto sí. ¡Ah! Soy vieja -continuó- en el oficio de la muerte. Muchachos de diecisite, en uno o dos casos, más jóvenes que yo fueron a las Malvinas. En Beirut, empiezan a los doce. Hay quienes cuentan que los hay más jóvenes. -Logan desvió la mirada- No, Pross. Hace tiempo que estoy en el juego.- Lo dijo pensativamente.
-¿Mataste a muchas personas?
Los motores del avión susurraron en la noche mientras ella se tomaba tiempo para contestar. Después se volvió a él; los ojos parecían agrandarse para él.
-Es casi como preguntarme cuántos amantes tuve. Algo personal.
-Yo no...
Logan lo silenció apoyándole brevemente un dedo en los labios; sonrió con tristeza, casi para sí misma.
-No muchos. A la vez, demasiados.-No dijo nada más, y volvió el rostro.

LYNX - Julian Jay Savarin

5 comentarios:

  1. Agustín, y si hubieran sido tres?
    De todas maneras, sigue siendo muy personal la pregunta!
    Abrazos!!

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  2. Hay cosas que no corresponde responder, no solo porque son muy personales, sino porque modifican el estado de cosas.

    Un saludo.

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  3. Dicen que cuando se trata de cometer un pecado, cuesta más el primero que todos los que siguen después.
    No sé exactamente en éste contexto, pero uno cuando pregunta algo (independientemente que corresponda o no la pregunta) tiene que saber que está expuesto a que no le guste la respuesta de ninguna forma.
    Besos

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  4. Yoni, bueno, eso depende del objetivo de la pregunta, que tal vez busca alterar el orden de esas cosas. En todo caso habría que evaluar si ese cambio es beneficioso o no, antes de responder.
    Abrazos!!

    Lola, eso ocurre no solamente con los pecados (se resalta más por el caracter negativo del acto) sino también en toda actividad humana.
    La respuesta puede no gustarnos, pero me parece que es mucho más shockeante cuando no la esperamos.
    Besos!!

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