jueves, 30 de octubre de 2025

Ordenanzas aprovechando el río revuelto

Aprovechando que es semana post elecciones, que el Concejo Delirante está contando votos y no sabe cómo hacer para balancear los números, haré efectivos algunos proyectos de ley que no prosperaron por la vía legislativa por la vía de la firma rápida y expeditiva de un decreto, como para que no se olvide que acá el Intendente soy yo.
Aquí, los títulos de dichas normativas:
1- Todo aquel que habla por celular cuando maneja, incluso con manos libres, auriculares o esos dispositivos que se pegan al vidrio con sopapa, serán inmediatamente enviados a la Siberia argentina, es decir, el corralón municipal. .
2- Los que tuvieran pileta y no compartieran con la plebe, se le expropiará la casa y prohibirá la entrada a la ciudad por 3 meses (hasta el otoño).
3- Las confiterías habrán de obsequiar una botella de lo que se esté tomando por cada cuatro abonadas. Y los platitos de la picada serán a mitad de precio.
4- Los cadetes de delivery llevarán un chaleco naranja con apliques grises y harán una coreografía antes de entregar el producto. Los taxistas saludarán con simpatía y no darán conversación al que no lo desee, bajo pena de cancelación de la licencia por 3 meses. Los choferes de aplicación deben tener canapés y rolls de sushi para convidar a sus pasajeros.
5- En los restaurantes, habrá lo que el cliente desee, independientemente de que la carta lo diga o no.
6- En los recitales que se efectúen durante el verano, los organizadores se asegurarán de proveer líquidos a los asistentes, de acuerdo a la temática del espectáculo. Ejemplo: cuarteto-fernet; bossa nova-caipirinha; tango-vino en damajuana; rave-agua mineral; show de flamenco-cava.
7- En los establecimientos sex shops, el vendedor no le extenderá factura antes de haber escuchado el compromiso del cliente de volver por lo menos tres veces más. Si quiere y gusta, el cliente puede pedir control de calidad en los objetos comprados; esto puede dar lugar a excepciones no contempladas en esta ordenanza.
8- Las riñas callejeras tendrán castigos ejemplares. Un disturbio mediano se castigará con tres meses de limpieza de calles. Un tole tole monumental (más de 20 contendientes) será multado con seis meses de pasantía en un local de venta de ropa, para aprender modales y ser humillado sin razón.
9- Las farmacias se abstendrán de vender todo tipo de tranquilizante. Se utilizarán sucedáneos, tales como el té de tilo y manzanilla, el cachamate y la valeriana natural, sesiones de hamaca paraguaya con un  adonis abanicando con una hoja de palmera y masajes con adoquines de granito.
10- Las librerías sacarán de sus vidrieras textos de política y ensayos sobre cómo el mundo se va por la alcantarilla y le darán espacio a Corín Tellado, Robin Cook, J.K.Rowling y John Green. En tanto que las tiendas online promocionarán las Guerreras K-pop, los libros del húngaro que ganó el Nobel (apellido impronunciable) y de Hugo Alconada Mon.
11- Se les obligará a los comercios a poner parlantes en las veredas y establecer un cronograma de estilos musicales, de acuerdo a la hora del día, así se podrá bailar, tararear o llorar, según se desee.
12- Las fuerzas de seguridad solamente usarán la fuerza cuando se los desafíe a una pelea cuerpo a cuerpo, en un ring ambientado y con el árbitro arreglado.
Salut mes citoyens!
Int. Etienne

miércoles, 22 de octubre de 2025

Salvoconducto

Olvidemos que el encierro es forzado y que disponemos de todo este tiempo por elección, y  que decidimos utilizarlo de la mejor manera posible. El escenario nos agobia, las paredes que nos rodean parece que cada vez están más encima nuestro, comienza a faltar el aire, no queremos estar más tiempo encerrados...
Hay una solución, siempre hay una salida.
En todos los rincones brillan las portadas de infinitos mundos que nos llaman a ser visitados, a hacernos amigos de sus habitantes y de ser partícipe de enormes aventuras, dolorosas decepciones, ausencias irrecuperables, forjar alianzas y entablar guerras por el honor. Todo eso y mucho más desde la comodidad de tu rincón favorito.
Antes, la excusa era no tener tiempo. Ahora, con esa variable a disposición, solamente es cuestión de tomar la decisión de qué mundo visitar, abrir la mente, cerrar los ojos y con paciencia, ir recorriendo los sinuosos caminos que la aventura te presente. Eliminar los límites a través de la imaginación, crear esos mundos sin moverse de tu casa y hacer de este encierro un viaje sin escalas. 
De propia experiencia les digo que en los momentos más solitarios, esos en que todo parece alejarse, incluso aquellos que parecen incondicionales, la imaginación te da el antídoto al síndrome de aislación, miedo y desconfianza que por todos lados brota sin control.
Aprovechemos a visitar esos mundos en este momento en que los salvoconductos tienen próximo el vencimiento y renovemos la esperanza en esos indómitos personajes que alguna vez nos enamoraron y que siguen corriendo extraordinarias aventuras cada vez que los visitamos.
Si esta actitud me sirve para sobrevivir las 3 cadenas perpetuas que me enchufaron y no ser desaparecido en el fondo del pabellón, después les autografío mi biografía con dedicatoria y todo. 

martes, 14 de octubre de 2025

Los lugares cotidianos

A veces, para sentirnos más protegidos, buscamos lugares de apoyo, puntos familiares de esos que queremos ver todos los días, miramos calles, árboles, vientos y temperaturas medias. Buscamos orientarnos en un mundo que intenta aplastarnos con su infinitud, que abre ante nosotros un mapa enorme para nuestro espíritu de hormiga.
¿Y saben qué buscamos? Rostros cotidianos.
La vecina del frente, con los ruleros y el mini perro en brazos, el abogado de la esquina, lleno de celulares y el pelo siempre peinado a la humedad, el político que nunca se ve pero imaginamos de memoria sus canas y su poblado bigote. Los coches que pasan a la misma hora llenos de chicos en dirección a la escuela; el chirrido de los frenos del colectivo; el pitido del semáforo que indica que está cambiando de color.
Estos mínimos personajes, esos sonidos de rutina, nos aseguran que estamos en el escenario correcto. Porque podemos equivocarnos de teatro y de golpe, tener un elenco diferente, un decorado desconocido. Y ahí, desamparados, empezamos a encontrar (porque no los buscamos, por lo menos en forma consciente) rostros que nos parecen familiares. Hasta rostros de quienes menos conocemos o apreciamos se aparecen en esa danza caótica de transeúntes ubicuos. 
A mi personalmente me asusta, mi espíritu sencillo se ve atemorizado por la posibilidad de una intervención canallezca, tal vez diabólica. Me cuesta creer que es casualidad que se den estos eventos repetitivos, lo mismo que la presencia aleatoria de caras conocidas; aún así no puedo evitar encontrarme con ellos, y cuando los veo me sonrío, sólo para ocultar el temor y ganarme su simpatía. Debo reconocer que no confío en ellos, los rostros cotidianos no logran engañarme, sé que quieren convencerme y transmitirme seguridad pero no, no lo van a lograr.