Hay veces que paso de largo, cuando voy apurado, con cosas en la cabeza, tal vez hasta llegando un poco tarde al trabajo porque ya me sé de memoria la secuencia. Pero en general aminoro el paso, me hago el ocupado en mis pensamientos y hasta simulo escribir un mensaje de texto en el celular, me gana la curiosidad morbosa del ser humano.
Y tiene lugar el acto...
La escena es siempre la misma. El auto estaciona frente a la guardería
de niños y de él se bajan una mujer y una niña con la intención de ingresar al
establecimiento del cual emerge otra mujer con delantal y camperita de
hilo. Primero son algunas lágrimas tímidas que bañan las mejillas, los
brazos siempre extendidos como buscando refugio, luego empiezan los
gimoteos y las palabras que apenas se entienden, ahogadas por el llanto
que empieza a ser más ruidoso y por los mocos que asoman por la nariz.
La señorita del establecimiento intenta con suaves palabras pero firme
tono de voz convencerla de que es lo mejor, que no pasará nada, que más
tarde se podrán reencontrar y jugar juntas y otros argumentos que varían
de acuerdo a la imaginación de la docente. De a poco la llorosa va dejando el
refugio, el hombro de la docente y ya más calmada recibe ayuda para
limpiarse la nariz y secarse las lágrimas, hipando con un poco de
vergüenza y mirando por el rabillo del ojo, agradece y se sube al auto
rápidamente.
Su hija, testigo de la escena aunque con expresión ausente, corre rauda y feliz al interior del jardín para encontrarse con sus amiguitos.
Tal cual! ajaaaajajj me ha encantado! Es tal cual. El consuelo lo necesitamos las madres muchas veces! Ese giro final, me enamoró.
ResponderEliminarBeso enorme.
Jaja, si, está todo enfocado en los hijos y se olvidan que los padres también tenemos sentimientos! Y a veces, los hijos salen desamorados...
EliminarPequeñas escenas de la vida cotidiana, es eso.
Besote para vos!
Jajaja me engañaste! Hermoso relato con un final muy simpático! Un gusto leerte, saludos
ResponderEliminarJaja, no era la intensión engañar, bueno un poco tal vez, orientar la historia hacia lo lógico, lo previsible y después mover de golpe el foco para develar la imagen entera. Mantener la atención del lector, es lo más difícil.
EliminarBesos y gracias por pasar!
jajajaja pues sí, vamos , nos engañaste a todos jaja...yo leí ..." se sube al auto rápidamente " y me dije ¿cómo al auto ? pero...¿no sé queda en el cole ? muy muy bueno el giro ...sinceramente es verdad , a las mamás nadie nos consuela y te juro q yo a veces salí tal cual cuentas ..jaja bueno , sin moco, ni hipo..pero sí...chorreándome las lágrimas ; ) ..gracias , un abrazo fuerte !
ResponderEliminarJajaja, vos dijiste, es muy pequeña para conducir el auto! Cómo es que la madre la deja faltar sin decirle nada? Obvio que la importancia de la formación y crecimiento de la personalidad de los niños es vital, pero si, nos olvidamos de que los padres también tenemos sentimientos!
EliminarGracias a vos por pasar!
Hmmmm mi madre nunca nos llevó al cole, siempre pasaba el transporte escolar, como los gringos, a saber si lloraba adentro de la casa sola, aunque ella siempre ha sido como Morticia Addams, las pocas veces que llamaban a los padres a estar presentes la recuerdo ahí sentada mientras nosotros los niños cantábamos o hacíamos quién sabe qué cosas, estaba BIEN aburrida, con cara de ya querer irse, un día que alcancé a ver cuando los padres se iban, le decían "adiós" a sus hijos mientras caminaban a la puerta de salida, ella sólo caminaba hacia ella sin verme, casi aliviada de que terminó el evento y ya se podía ir. Cuando íbamos al parque lo mismo, ella ahí sentada esperando a ver a qué hora podíamos irnos o a qué hora mi hermano y yo nos aburríamos para que nos fueramos, supongo que debo agradecerle eso porque nos hizo menos dependientes pero ¿valdría la pena? ahora casi ni nos hablamos los 3.
ResponderEliminarhttps://imgflip.com/s/meme/Sad-Pablo-Escobar.jpg
Sí, yo digo que sí. Por un lado, no tenemos parejas, no experimentamos enojarnos con ellas, la ruptura, las canciones tristes y maricas para el dolor, no experimentamos los hijos y todos nos dicen que qué bueno que no los tenemos, por el otro lado, no experimentamos ese amor supongo.
Pues no sé, y la tecladofilia me invade, ya hace tiempo no escribía tanta estupidez en un comentario, tengo comezón en una región no agradable a la vista, espere... ok ¿qué decía? ah sí, supongo que las 2 cosas son como las matemáticas, los pares se cancelan o algo así, pero sentir tales cosas ¿valdrán la pena? y también ¿valdrá la pena sentirse tan mal después?. Creo que no me interesa mucho, dejen de leer esto si no son Etienne, carajo, para eso me salí de las pendejadas de los jueves, porque no les gusta leer mucho y ahora están leyendo esto, púdranse, no chinguen. Eso sí, si el Atlas no gana quemo mi remera o la revendo para los verdaderos fans.
Conejo, lo del transporte se usa también, pero como última opción debido a su alto costo y no le vamos a pedir al chofer que haga semejante actuación, no le corresponde. Los padres no somos conscientes del impacto que tienen nuestros gestos, palabras, silencios en nuestros hijos, es muy importante estar.
EliminarQué pasó en el partido del Atlas? adicionaron como medio tiempo más, para que pueda meter el gol ganador. MMMM, no está arreglado con las casas de apuestas?
Conozco muchos padres/madres que ni siquiera detienen el auto cuando deben dejar a sus retoños en las escuelas, abren la puerta y parecen lanzarlo para no les atrape el tránsito... Vaya uno a saber para qué los tuvieron si iban a tratarlos de esa manera.
ResponderEliminarSaludos,
J.
José, ese es una de las tantas manifestaciones de desinterés y desprecio por los hijos; opino igual, para qué los traen al mundo, por qué son tan irresponsables?
EliminarAclaro que lo ideal es estacionarse en donde haya lugar y acompañarlo hasta la puerta; el llanto y los mocos son opcionales.